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Arquitectos: Urgell - Penedo - Urgell, Architects.
- Área: 17 m²
- Año: 2014
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Proveedores: GRAPHISOFT
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Entre 1991 y 1992 fueron adjudicados a través de concurso público de proyecto y precio los docks de "Borde Madero", y en particular en octubre de 1992 se adjudican a la Universidad Católica Argentina (U.C.A.) los cuatro galpones del Dique 2.
El Dock 9 para el que presentamos esta propuesta de completamiento, producirá el cierre volumétrico del conjunto del campus de la Universidad Católica Argentina. El mismo limita al sur con el espacio interdock y al norte con el Boulevard Azucena Villaflor / Av. Belgrano.
Ubicado en el Distrito U32 - Area de protección Patrimonial Antiguo Puerto Madero, y de un alto valor patrimonial arquitectónico, su reconstrucción ha respetado los lineamientos de la normativa en cuanto a los volúmenes y las alturas.
Los requerimientos de programa entregados por la Universidad incluyen una Capilla Mayor ubicada en el sector sur del Dock. Dicha pieza integrante del conjunto, debía expresarse con una imagen simbólica propia del culto y en consecuencia poseer una inconfundible identidad volumétrica. La propuesta tiene su expresión formal hacia el espacio entre edificios 9 y 10 (interdock), aspirando a que este último funcione como atrio de la Capilla.
Para el logro de las premisas anteriormente mencionadas, se ha "abrazado a la Capilla" siguiendo los lineamientos volumétricos del edificio original, capitalizando a la vez la posibilidad que la normativa otorga para flexibilizar el volumen en las fachadas norte y sur de los docks.
Arquitectura y religión comparten el elogio por la luz, sus múltiples referencias en los relatos bíblicos despiertan el interés de entenderla como un elemento imprescindible en la concepción de un espacio sacro.
Tres lucernarios escondidos por pliegues que conforman el espacio de la nave central, permiten el ingreso de la luz, sin que esta distraiga la atención de los feligreses.
Los dos lucernarios laterales acompañan a los deambulatorios, marcando su direccionalidad hacia el altar, espacio central del rito.
Una tercera apertura moldea el retablo a través de un plano de luz que se va desmaterializando en sentido ascendente.
La síntesis en la elección de los materiales y el abandono del ornamento, proponen un espacio austero, que refuerza la espiritualidad que le confiere la luz.